Que ver en Polonia

Auschwitz II - Birkenau

Este campo de concentración utilizado por los nazis durante la II Guerra Mundial, donde a la entrada todavía podemos leer "Arbeit Macht Frei"(el trabajo os hará libres) y uno de los más populares, podemos ver como eran las instalaciones, patios, casas y pasillos, así como la cámara de gas y la sala de cremación.

Minas de Sal de Wieliczka

Si vas a Cracovia no puedes dejar de visitar las Minas de sal, estan en Wieliczka, a 15 km de Cracovia.

Declaradas patrimonio de la Humanidad en 1978, tienen una profundidad de mas de 300 metros y 300 km de longitud. Desde el siglo XIII hasta hoy han sido explotadas sin interrupción. El recorrido turístico es de unos 3 km con guia en ingles o polaco (el de castellano lo tienes que reservar con antelacion) y en algunos momentos de la visita te sientes como si estuvieras en la cueva de los enanos del Señor de los anillos. Las minas tienen de todo, oficina de correos, campo de futbito, restaurante... Y hasta capilla, sin duda es esta la parte mas impresionante de la visita, ya que hay esculturas de sal del papa y otros santos e imagenes de la vida de Jesús en relieve.

Castillo Wawel

Este impresionante castillo de casi mil años de antigüedad, es de esos castillos que los cineastas utilizan para influenciarse para hacer peliculas de miedo. Menos mal que lo ví a plena luz del día y el sol brillaba, seguro que visto con el cielo gris y medio lloviendo hubiese sido diferente. Lo cierto es que no entramos ya que llegamos demasiado tarde, casi a las 4 de la tarde y se necesita más de mediodía para visitarlo medianamente bien. El vídeo muestra de nuevo la exquisitez en las construcciones tán arraigado en este país, por lo menos hace cientos de años; también llama la atención que por aquellos entonces, casi 700 años atrás se utilizase el mismo material que en el siglo pasado y que todavía en este se sigue demandando para nuevas construcciones; ese ladrillo de arcilla rojo que como se vé en los diferentes vidéos que hay en mis rincones de minube se ha utilizado a lo largo de varios siglos hasta nuestros días.